Cuando la tristeza se torna un vicio.

Viviendo con mi ex.

Me mudé. No fue como quería. Terminé viviendo con mi ex.
Pura ironía de la vida tomar esta decisión importante para cualquier pareja cuando ya no lo sos.

Confesiones XXXIV

Jamás tendría sexo con un hombre que baila reggaeton.

Confesiones XXXIII

En el último mes me enamoré a primera vista más de tres veces.

Confesiones XXXII

Estoy bebiendo suficiente vodka como para ganarme el Amy Winehouse´s Award 2012.

Confesiones XXXI

Dejé plantado a un hombre en el medio de nuestra primer cita. Me recibí oficialmente de forra.

Confesiones XXX

Sentir el poder de la juventud y la belleza, y aprovecharse de ello.

Confesiones XXIX

Tengo una obsesión. No me gusta que me toquen innecesariamente. Mucho menos extraños o desconocidos.

Sobre gente obtusa

 "(...) la gente que se da citas precisas es la misma que necesita papel rayado para escribirse o que aprieta desde abajo el tubo del dentífrico."

Julio Cortázar, Rayuela

Me molestan las personas que al conocerte te preguntan que estudias o de que trabajás, como si esas dos preguntas definieran la existencia de alguien. Jamás preguntan que es lo que uno ama, lo que te apasiona, lo que uno sueña, que es lo que te resulta placentero.

Confesiones XXVIII

Pese a ser bastante feminista me agrada que los hombre sean caballeros:  me abran la puerta, me dejen pasar primero, no me dejen caminar del lado de la calle.
Es un buen parámetro para saber atento es el otro.

Duda

¿Como me recordarán aquellos hombres que se transformaron en puro racconto?

Confesiones XXVII

Querer una espalda pura.

Confesiones XXVI

Cuando todo te gusta por hartazgo.

Confesiones XXV

Querer el roce.

Confesiones XXIV

La liviandad de dialogar sobre lo más profundo con el hombre más ajeno.

Emergencia

Vino la ambulancia. Me sentía pésimo.
Me inyectaron dos veces. Me llenaron de preguntas.
Lloré demasiado.
El cuerpo grita por uno cuando solo queda esperar en silencio.
Después del ocaso se habita el alba.
Estoy feliz por lo que esta sucediendo.
Menos tengo, menos necesito, más sucede.
Hace meses que no estaba en plenitud.
Necesito un abrazo y un vaso de vodka.
Necesito lo que aún no se ha creado.
El placer de borrar, tirar y olvidar.

Confesiones XXIII

Tener menos vida amorosa que el Papa.

Shame on you.

El placer de dejar.

Confesiones XXI

Amo irme a dormir mirando dos capítulos de Seinfeld.

Confesiones XXII

Los hombres me temen.
Y lo peor es que me lo han dicho.

Shame on me.

Descubrí que soy muy superficial.

Confesiones XX

Enterarte 48 hs después que arreglaste una cita embriagada de Malbec.
Y obviamente no asististe.

Confesiones XIX

Decirle malcogido a alguien es maravilloso.

Confesiones XVIII

Sentir ajeno lo cotidiano.